¿Conoces la misión y la visión de la empresa en la que trabajas? Probablemente no, y en mi opinión, la causa es la falta de comunicación.

La historia es simple y a menudo se repite. Quienes crean una empresa se enteran de que deben tener una misión y una visión para su negocio. Si son fieles a ella  -y la fuerza los acompaña- logran que la empresa prospere en el tiempo e incluso pueden incorporar a más gente. Es justo ahí cuando empiezan los problemas.

Es habitual que quienes trabajan en una organización nunca se enteren de la misión y la visión de esta, y probablemente harán por la empresa lo que ellos consideran que es bueno. Se vuelve entonces un acto de fortuna que la empresa vaya hacia algún lado. Muchas veces pasan años sin que los fundadores revisen y actualicen su declaración de principios. Es más, cuando la plana mayor declara la misión y visión de la empresa, este ejercicio no permea ni siquiera hacia su equipo directo.

Entonces ¿cómo podemos hacer que las personas aporten con su trabajo en la dirección deseada?

Para que la misión y la visión encaminen a quienes trabajan en una compañía, deben ser comunicadas. Acciones como:

  • Generar reuniones de coordinación de área al menos una vez al mes. En estas se debe conversar si el trabajo realizado está alineado con lo que espera la organización. 
  • Incluir en el pie de página de los correos corporativos información en torno al tema. 
  • Agregar en los comunicados de la empresa temas relativos a su misión y visión.

Quienes trabajan deben saber por qué lo hacen y cuáles son los valores de la empresa en la que dedican parte de su vida. La misión es la razón de ser de la empresa y su visión en dónde quiere verse en un plazo determinado. Tan simple y complejo como eso. 

Hace unas semanas fui al supermercado en auto. Al salir me encontré con un camión repartidor del mismo supermercado, el cual se encontraba bloqueando la salida de sus clientes (yo incluido por su puesto). Una fila de clientes esperaba salir del estacionamiento para continuar con su día a día. Todos estábamos pasando un pésimo momento en cuanto a calidad de servicio y probablemente ni el encargado del local ni el chofer del camión estaban pensando en que los clientes eran importantes para esa cadena de supermercado. Probablemente la misión y la visión del supermercado está enmarcada y colgada en la pared de la oficina de varios gerentes, pero quienes trabajan día a día no están pensando en ella.

Entonces, para poder comunicar mejor la misión y la visión, se debe invitar a quienes forman parte de la organización a conversar si las acciones que realizamos día a día o mes a mes si se quiere, ayudan a la empresa a alcanzar sus objetivos de largo plazo. Y si no lo hace, ¿qué se necesita para que ello ocurra? Para las organizaciones más pequeñas esto debería ser más fácil de implementar.

En el momento en que una empresa se preocupa de comunicar su misión y visión, poco a poco irá teniendo pequeños éxitos y logrará que en el futuro todos en la empresa sepan cuál es el objetivo mayor por el cual todos trabajan.

Si quieres ayuda profesional con este u otros temas de gestión me puedes escribir a ivan.martinez@fullgeston.cl.